Cuando aún no hemos experimentado el avivamiento en nuestras vidas, hacemos las cosas sin saber el real propósito y beneficio que hay en ellas. Vivimos una vida de religiosidad, creyendo que el simple hecho de asisitir a un centro cristiano o de levantar las manos en los momentos de adoración ya tenemos ganados el cielo.
Tal como presentado en clase, aqui tenemos un caso típico de infidelidad:
La infidelidad se produce cuando se pierde la pasión, cuando ya no creemos encontrar satisfacción en una relación. Quizá por una monotonía instalada que mayormente es el resultado de la falta de propósitos, de metas, de objetivos.
El avivamiento es reanimar. Si tomámos este significado al primer grado, vemos que es volver a la vida, en otras palabras devolver esas pulsiones de vida, la pasión, el propósito por el cúal Dios nos creó, nos amó y nos redimió.
Disfrutalo!!!
Tal como presentado en clase, aqui tenemos un caso típico de infidelidad:
La infidelidad se produce cuando se pierde la pasión, cuando ya no creemos encontrar satisfacción en una relación. Quizá por una monotonía instalada que mayormente es el resultado de la falta de propósitos, de metas, de objetivos.
El avivamiento es reanimar. Si tomámos este significado al primer grado, vemos que es volver a la vida, en otras palabras devolver esas pulsiones de vida, la pasión, el propósito por el cúal Dios nos creó, nos amó y nos redimió.
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